La finalidad del efecto aurora es lograr un acabado visualmente impactante y único, que se destaca por su brillo iridiscente y su capacidad de reflejar diferentes colores, como tonos pastel, metálicos o perlados, según el producto utilizado. Es una excelente opción para quienes buscan algo más que un simple esmalte, proporcionando un efecto tridimensional que añade sofisticación y un toque artístico a las uñas.
Cómo se Aplica el Efecto Aurora
La aplicación del efecto aurora generalmente se realiza en tres pasos:
Preparación de las uñas: Como en cualquier otro diseño de uñas, es fundamental preparar bien las uñas. Esto incluye limarlas, empujar las cutículas, aplicar una base protectora y asegurarse de que las uñas estén completamente limpias y secas.
Aplicación de esmalte base: Se aplica un esmalte de base que generalmente es de un tono claro o transparente (como blanco, rosa claro, o nude). Este paso sirve para crear la base sobre la cual se aplicará el polvo o gel de aurora. Es importante que esta capa base esté completamente seca antes de continuar.
Aplicación del polvo o gel aurora: Existen dos métodos comunes para aplicar el efecto aurora:
Con polvo de aurora: Este polvo es de textura fina y tiene partículas iridiscentes. Se aplica sobre la capa base ya seca (generalmente después de aplicar un top coat y secarlo), usando un aplicador o esponja suave. Se debe frotar suavemente el polvo sobre la superficie para que se adhiera. Después, se sella con una capa de top coat para fijar el diseño.
Secado y sellado: Si se usaron geles, se curan bajo lámpara UV o LED. Si se aplicó polvo, se sella con una capa de top coat, que luego se seca para garantizar la durabilidad del diseño.
